lunes, 22 de junio de 2015

Resiliencia: La historia de Emmy Werner

Emmy Elizabeth Werner es la creadora del término Resiliencia, nace el 26 de Mayo de 1929, en Eltville (Alemania), aunque perteneciente a una familia mitad alemana, mitad francesa, lo cual propició que en su hogar leyeran en ambos idiomas, incluso a veces también en inglés, por ello su amor por la lectura se fortaleció. Cabe señalar que Emmy pertenece a una familia con una larga historia en el ámbito de la imprenta – remontándose hasta Gutenberg – y en la elaboración de vinos.

Durante la Segunda Guerra Mundial su escolarización desde los 10 años fue irregular. Acudía a la Middle School (escuela para niños de 9 a 13 años) en medio de los bombardeos de los aliados. Recibiendo clases, o más bien fragmentos de aprendizaje, en sótanos antiaéreos. Durante este tiempo, y en postguerra, Emmy tenía dos “objetos de apego": los libros, y su perro Lux. Y así fue creciendo. en los escenarios de guerra: muerte, niños huérfanos vagando sin rumbo, falta de alimentos… hasta que aproximadamente un año y medio después, pudo regresar a una escuela en la que faltaban muchos de los profesores y niños que un día conoció. Les hicieron recuperar, en unos 18 meses, los años de escolarización perdidos. Estudió hasta 1950 en la Universidad Johannes Gutenberg, en Renania (Alemania).

En 1952, Emmy emigra a Estados Unidos, obteniendo la nacionalidad en 1962. Allí, en la Universidad de Nebraska-Lincoln, obtiene su Doctorado. Pero también realiza estudios de postgrado en la Universidad de California-Berkeley. Considerada como la cuarta mejor universidad del mundo.

En la actualidad, Emmy es profesora emérita en la Universidad de California, en el Departamento de Desarrollo Humano y Comunidad.  Es miembro de la APA (Asociación Psicológica Estadounidense), de la SRCD (Sociedad para la Investigación en Desarrollo Infantil), del II.

Estudios:

Vulnerable but Invincible el estudio que Werner llevó a cabo y  por el que se comprobó que había quiénes estando, a priori, condenados a presentar problemas futuros, conseguían llevar una vida exitosa. No obstante, está publicado bajo el nombre: “Vulnerable but Invencible. A Longitudinal Study of Resilient Children and Youth.

Cuando Emmy Werner comenzó esta investigación longitudinal, en 1955, en una isla de Kauai (Hawai), no sospechaba que los resultados obtenidos sentarían las bases de una nueva concepción del ser humano.

Inició su estudio con una muestra de 700 niños recién nacidos procedentes de familias que vivían en situaciones desfavorables de pobreza, desestructuración, enfermedades mentales, alcoholismo. Con  intuición de que, tras 30 años de seguimiento, obtendría datos que confirmaran que esos niños expuestos a entornos desfavorecidos, desarrollarían patologías de cualquier índole.

Efectivamente, parte de la muestra confirmó esa hipótesis. La sorpresa la obtuvo cuando el 30% de los niños no sólo no desarrolló ninguna patología sino que vivía una vida completamente normal, con un desarrollo sano y positivo.